¡El futuro de la humanidad se fragua en la familia!
En su carta encíclica Familiaris Consortio, San Juan Pablo II nos ayuda a descubrir la gran importancia que tiene la familia en nuestra sociedad y nos exhorta a seguir luchando por mantenerla “viva” en medio de las dificultades que enfrentamos hoy.
“En los tiempos modernos la familia moderna, ha sufrido quizás como ninguna otra institución, la acometida de las transformaciones amplias, profundas y rápidas de la sociedad y de la cultura. Muchas familias viven esta situación permaneciendo fieles a los valores que constituyen el fundamento de la institución familiar. Otras se sienten inciertas y desanimadas de cara a su cometido, e incluso en estado de duda o de ignorancia respecto al significado último y a la verdad de la vida conyugal y familiar. Otras, en fin, a causa de diferentes situaciones de injusticia se ven impedidas para realizar sus derechos fundamentales.
La iglesia, consciente de que el matrimonio y la familia constituyen uno de los bienes más preciosos de la humanidad, quiere hacer sentir su voz y ofrecer su ayuda a todo aquel que, conociendo ya el valor del matrimonio y de la familia, trata de vivirlo fielmente; a todo aquel que, en medio de la incertidumbre o de la ansiedad, busca la verdad y a todo aquel que se ve injustamente impedido para vivir con libertad el propio proyecto familiar. Sosteniendo a los primeros, iluminando a los segundos y ayudando a los demás, la iglesia ofrece su servicio a todo hombre preocupado por los destinos del matrimonio y de la familia.
¡El futuro de la humanidad se fragua en la familia! Es necesario que las familias de nuestro tiempo vuelvan a remontarse más alto. Es necesario que sigan a cristo”. “Familiaris Consortio, San Juan Pablo II”
Los exhortamos a que se llenen de esperanza y de nuevas fuerzas, y sigan su labor de levantar sus familias para Cristo, y recuerden lo que dice nuestro Señor Jesucristo: ¡Animo! Yo he vencido al mundo. Jn. 16,33
En Cristo,
Yamilka Genao,
Directora Asociada de la Pastoral Familiar Hispana